sábado, 23 de mayo de 2009

viernes, 22 de mayo de 2009

Noelia Noto: la actriz argentina que triunfa en España

A los 11 años Raúl Lavié y Pinky quedaron fascinados con esta jovencísima pelirroja que daba justo, por talento y por look, para el protagónico del musical Annie, la primera producción de comedias musicales en Argentina, y que vino con todo un lujo tecnológico detrás y una inversión de 350 mil dólares. La niña-actriz se convirtió pronto en emblema de la tele argentina de los años 80 y 90. Desde la flaquita de rulitos de Pelito, la preciosa adolescente de Clave de sol, hasta papeles más importantes en unitarios de Alta comedia, personajes de telenovela en Princesa, Casi todo casi nada y las nuevas series de los 90: Gasoleros y El garante. Estudió teatro con grandes como Julio Chávez y Augusto Fernandes, pero también se especializó en tango, flamenco y jazz. Así fue como pudo desplegar sus dotes no sólo como actriz sino también como bailarina y cantante en comedias musicales como My fair lady, Grease, Drácula y El rey león. También incursionó en el teatro para chicos y en el universo de la publicidad. En 2006 se mudó a Madrid. Al poco tiempo, se matriculó en un seminario de monólogos dictado por Tamzin Townsend, una prestigiosa directora inglesa y una de las directoras más prolíficas de España de los últimos 2 años. La realizadora pensó en ella para la obra Carnaval, de Jordi Galcerán, el autor de El método Grönholm. Carnaval se estrenó en Madrid el año pasado, y ahora están de gira por toda España. Pero el 30 de marzo de 2009, Noelia Noto se convirtió en la primera argentina en recibir un Premio Max, el máximo galardón al teatro español. Las Palmas de Gran Canaria fue el paradisíaco contexto donde recibió el premio a la mejor actriz de reparto por su rol de informática en Carnaval, dejando atrás, incluso, a actrices españolas de renombre. Pero eso no fue todo: el director Juan Martínez Moreno la convocó para su película Un buen hombre, con Tristán Ulloa y Emilio Gutiérrez Caba, que se estrenó en España el 30 de abril de 2009. Si la vieran actuar, tampoco podrían creer que Noelia Noto, como tantos otros talentos nacionales, no sea profeta en su tierra.

martes, 19 de mayo de 2009

Poema a la clase media

Clase media,
medio rica,
medio culta,
entre lo que cree ser
y lo que es
media una distancia
medio grande.

Desde el medio
mira medio mal
a los negritos,
a los ricos,
a los sabios,
a los locos,
a los pobres.

Si escucha a un Hitler
medio le gusta
y si habla un Che
medio también.

En el medio de la nada
medio duda,
como todo le atrae
(a medias)
analiza hasta la mitad
todos los hechos.

Y (medio confundida)
sale a la calle con media cacerola,
entonces medio llega a importar
a los que mandan
(medio en las sombras).

A veces, sólo a veces, se da cuenta
(medio tarde)
de que la usaron de peón
en un ajedrez que no comprende
y que nunca la convierte en Reina.

Así, medio rabiosa
se lamenta (a medias)
de ser el medio del que comen otros
a quienes no alcanza
a entender
ni medio.

Mario Benedetti

miércoles, 13 de mayo de 2009

Plebiscito y proceso golpista

Hace unos días, el conocido amante de los golpes Mariano Grondona y el patrón sojero Hugo Biolcati se divertían en la televisión jugando a las adivinanzas sobre el momento en que se produciría el golpe destituyente. El candidato propuesto, que por otra parte ya tiene el gabinete en la sombra, es Julio Cobos. La manera sobradora en la que se expresaron ambos protagonistas es una clara manifestación de la seguridad con la que camina el movimiento golpista (o “destituyente” para no herir oídos delicados). Desde que las patronales del agro se largaron a hacer el agresivo y violento lockout del año pasado, estuvo claro para quien quiso verlo que lo que se pretendía como máxima era la destitución del Gobierno y, como mínima, su debilitamiento. Por ello a Eduardo Buzzi no le importó que el rechazo de la 125 dañase logros para los medianos productores, pues lo que se pretendía era derrotar al Gobierno, debilitarlo para terminar con un Estado que pretende “entrometerse” en los negocios sojeros (... leer más en... Página 12)

Por Rubén Dri
(Página 12 - 12/05/09)

jueves, 7 de mayo de 2009

Esto da miedo

La titular de la Asociación de Familiares y Amigos de los Presos Políticos de la Argentina, Cecilia Pando, y una decena de seguidores caminaron esta semana por Plaza de Mayo exigiendo "juicio y castigo a los terroristas de los '70". Y tuvieron la excelente idea de pintar crespones negros sobre los pañuelos blancos que simbolizan la lucha de las Madres. Da miedo que todavía se escuchen y se vean alusiones a la teoría de los dos demonios. Esta gente habla de "un grupo de nostálgicos del terrorismo marxista de los 70”. Pero el terrorismo de Estado, para los que no saben, fue un abuso de poder sin comparación, sin derechos, sin democracia. Un autoritarismo sin piedad, que dejó nada menos que 30 mil desaparecidos. Y mató sin juicios... a todos: mató al amigo del amigo, al que caminaba por la calle, al que figuraba en la agenda del otro del otro, al de derecha, al de izquierda, incluso, a supuestos "aliados", y también, a todos los demás. Las víctimas no fuimos nosotros porque no habíamos nacido todavía, porque no estábamos en el país o porque no nos tocó. Las víctimas fueron secuestradas y torturadas sin justicia, sin piedad, sin nada. Y después murieron como perros y, por arte de magia, "desaparecieron": no estaban tirados ni en un descampado, ni en una vereda, ni adentro de una tumba, ni en el agua, ni en otro país... no estaban en ningún lado. Morían y desaparecían sin juicio, sin cárcel porque sí, todo el tiempo. Y no se podía hablar, no se podía estar en grupo, no se podía nada. Y así y todo, si te quedabas encerrado en tu casa (porque cualquier cosa que hicieras, cual-quier-cosa era sospechosa), igual te secuestraban, porque sí. Y los que se salvaron tuvieron suerte. No había distinción de ideologías, ocupaciones, trabajos, partidos políticos, nada. Pero esta "asociación" no sólo usurpó la misma plaza que cada jueves otras mujeres caminan en círculo desde hace más de 30 años para reclamar por sus hijos desaparecidos, sino que se tomó la patotera atribución de tachar símbolos y hablar de "memoria hemipléjica de la historia reciente", desconociendo o ¿no acordándose? de lo que realmente pasó en Argentina antes de la democracia. Da miedo, da mucho miedo...