Hoy leí una nota de María Julia Oliván llamada “Ella o vos”: ¿estamos cansados de la división?, y noto que escribe muy bien y que dice las cosas de manera exageradamente correcta. Nótese que digo "exageradamente", lo cual convierte al resultado, al menos para mí,
en algo más bien "incorrecto". Y lo sostengo así, aunque la
“izquierda progre neoliberal” se sienta re feliz con una nota como ésta, o
“representada” por alguien tan piola como María Julia Oliván. Pero, desde mi
punto de vista, la derecha argentina también debe sentirse re feliz si lee una
nota así, porque tanto para unos como para otros (y claramente para la Oliván), es SIEMPRE este gobierno el que genera la división. Parece que se
le ocurrió escribir su texto a raíz de la solicitada de De Narváez, solicitada que ella aclara que también genera división, pero… claro… no fue él quien tiró la primera piedra, sino que es un efecto
secundario de la división que siempre genera este gobierno. Qué desilusión: al final, lo que
dice ella es igual a lo que me dijo hace poco una persona cercana: que el otro día a Axel Kicillof le gritaron “judío de mierda” y “zurdo”
en el Buquebús y que lo invitaron a tirarse al medio del río con hijos pequeños y todo, no
de sacados que son nomás, sino porque “la violencia genera violencia”. Ajá, piensa
uno, eso debe ser como la chica que va en minifalda por la calle y es violada... y entonces uno se pregunta: ¿de quién
es la culpa? Y uno se debe responder: de ella, por supuesto. Ahora bien: la Oliván dedica toda la nota
a ¿lo intensa que es la Presidenta
y que por eso estamos como estamos? Digo yo: ¿no será más bien que la Presidenta es aguerrida
y que no acepta un “no” como respuesta? ¿Qué más queremos que una Presidenta
que no tema meterse con una enorme cantidad de conflictos que NADIE resolvió, que
la mayoría eludió, o a los que nadie se les animó? Porque la deuda venía de
décadas de historia e iba a seguir así y peor, pero durante este gobierno Argentina
renegoció la deuda externa y el desendeudamiento con el FMI. Las estatizaciones
–que para María Julia son deficientes o no tuvieron los resultados esperados- son
consecuencia de la política privatista de los ’90 (hace más de 10 años) y si seguíamos así ni caminar por la calle íbamos a poder sin pagar, pero desde 2003 se decidió no seguir tranzando
con todos. Hablamos de Aerolíneas, de YPF, de los
fondos de las AFJP, de Aysa... ¿Y de derechos humanos mucho no habla María Julia, no? Capaz sería
bueno nombrar el tema, al menos. ¡Porque los juicios son en base a hechos de los ‘70! ¡Y durante
todos estos años en nuestro país se proponían cosas tan hirientes como “pacificación” y “reconociliación”! En pocas palabras: ¡encubrimiento de los asesinos! Pero la Argentina de Néstor y
Cristina dio un giro jugado hasta convertirnos hoy en líderes mundiales respecto de los enjuiciamientos a genocidas. La causa AMIA tiene como 20 años y nadie hizo nada
o lo hicieron mal. Pero si la Presidenta se mete con estos temas para dar una
respuesta, o al menos, para empezar a encarar el problema, eso de por sí no
sirve, y chau. Y si sirve no está bien porque “el gobierno genera división”. Pero,
¿a ver si se entiende?, este gobierno propone modificaciones, en gran parte, a
favor (no en contra) de los argentinos, algunas más drásticas, otras más
suaves, algunas de a poco y, otras, como se pueda. Y se empiezan a concretar después de años en los que
no se hizo nada o se fue para atrás. Pero en cuanto se está empezando, entonces
se pide más y más, a tal punto que deja de importar el cambio y las posibles
mejorías, para enfocarse en lo que falta o en lo que la propuesta no incluye. Sólo
importa criticar, con o sin fundamentos. Ni la Asignación Universal por Hijo, ni una
computadora por alumno, ni el matrimonio igualitario, ni la Ley de Transgénero, ni la Ley de Medios ni la defensa de
la industria nacional… Son muchas cosas… Pero parecería que no existieran. Lo
importante es la crítica de lo que falta… Porque, en definitiva: “el gobierno es el que genera
el conflicto”. Ahora bien, yo lo que no entiendo es cómo alguien que empieza a
dar respuestas ¿es una persona demasiado intensa y confrontativa? Señores: los
grandes cambios en la historia no se hicieron respirando y excluyendo al distinto de mi comodidad individualista. Se
hicieron saliendo a la calle, animándose, arriesgándose. Pero, claro, acá “lo
piola” es “quedar en el medio” (o agredir en respuesta a la agresión
kirchnerista, claro). Lo piola acá, digo, es quedarse en el molde.
De este modo, se logra, como en el caso de la Oliván , quedar
bien con Dios y con el Diablo. Así, María Julia dice cosas “buenas” de Cristina
pero en cada frase esconde una crítica: “Generó
militancia juvenil después de décadas y armó lío, como diría Vicky Donda.”.
Mmm… ¿qué tendrá que ver una con otra? ¿Qué ambas son mujeres? Yo digo que María Julia se olvida de que para Donda, a diferencia de para Fernández, “portarse mal”
es igual a pasearse por la playa junto con Prat Gay y mostrar las tetas… Y también,
según la Oliván, “llegó el momento de
plantear una manera menos confrontativa de hacer política, de generar consensos
y subir la bandera de rendición a las dicotomías bipolares.” ¿Será que
quiere otra vez estos “ni”, como el títere de De la Rúa , que eludió casi todo
hasta hundir el país sin más? ¿O capaz haya que rever a un tal Macri, quien, como estamos en democracia, tiene el derecho de hablar y lo aprovecha dándose
el lujo inusitado de criticar a los cuatro vientos el intento de avance en la causa Amia
cuando no tiene cara, al haber dicho, hace no tanto, que ponía las manos
en el fuego por El Fino Palacios, el tipo vinculado, precisamente, a ennegrecer
la causa Amia y sospechado por escuchas telefónicas a familiares? Creo que se pueden decir palabras y frases "muy lindas", pero que el camino no es
para nada como dice “la piolada argentina”. Creo que no hay que temerle a las
confrontaciones, haciéndose cargo de qué dice cada uno sin echar culpas y
tomando una postura, comprometerse con lo que se piensa, incluyendo autocrítica y críticas externas, por supuesto, ¡¡pero no cambiando de postura cada vez o poniéndose en
el medio para siempre zafar de cualquier crítica!! A mi entender, estos ideales "piolas" son los que ayudan –en los hechos- a llevar a nuestro país a las ruinas, una y
otra vez.
miércoles, 13 de febrero de 2013
Suscribirse a:
Entradas (Atom)