Quien roba a un ladrón, ¿tiene cien años de perdón?

Ayer fui a ver una banda tributo a Joaquín Sabina, que, con perdón de los miles de fanáticos -y sé que los hay en cantidad y los respeto-, a mí… él no me gusta. Y fue mi primera vez en un recital de un grupo de este estilo (¿decir imitadores es muy fuerte?). Lástima que ni siquiera me gusta –en este caso- la versión original, pero bueno, son cosas que se hacen por acompañar a amigos a “eventos”. Esto me hizo pensar en el insólito boom de las bandas tributo a lo que sea y a quien sea. Los hay para todos los gustos: Geminis son nuestros Bee Gees, Dios Salve a la Reina, una de las tantas bandas Queen del país, Mendigos del Paraíso, tributo a Guns n' Roses; Mestizo, clones de U2... Y también, tributo a los nuestros: a Soda, a Ataque, y a miles de etcéteras. Pero además, descubrí otro fenómeno, aún más curioso… En tema TRIBUTO los infaltables, los pioneros son: Danger Four; y luego vinieron otros, como The Beats, The Shouts… ¿cuántas bandas tributo Beatles hay en Argentina -si bien los Danger Four son uruguayos-? Deben ser infinitas. Pero la novedad –al menos para mí- es que ahora hasta hay bandas tributo a las bandas tributo (!!!). Sin ir más lejos, The Bis no tiene como referente a los cuatro de Liverpool, sino a los argentos The Beats. ¿No es buenísimo?